Lanzamiento de la Red ISPA y presentación de su primer informe: La Argentina frente a la pandemia
El 21 de agosto en el marco del webinar organizado por la Agencia I+D+i (Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación), se presentó la Red ISPA (Red de Investigaciones Socioeconómicas Públicas de la Argentina), integrada por el CIECTI, el CEP XXI (Centro de Estudios para la Producción) del Ministerio de Desarrollo Productivo y la SsPEyE (Subsecretaría de Planificación Estudios y Estadísticas) del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
La Red ISPA nace con el propósito de articular los distintos saberes desarrollados en instituciones y agencias en diferentes niveles y estructuras del estado nacional, las que tienen por objeto proveer insumos a los decisores de políticas públicas. La creación de la Red procura evitar el solapamiento de esfuerzos y permitir así un mejor aprovechamiento de los recursos humanos y financieros mediante la coordinación de agendas de investigación complementarias y, al mismo tiempo, poner en valor e incrementar la visibilidad de los productos generados.
El lanzamiento de la Red tuvo lugar en simultáneo con la presentación del primer informe de trabajo producido en conjunto por los centros integrantes de la red: “La Argentina frente al COVID-19: desde las respuestas inmediatas hacia una estrategia de desarrollo de capacidades”*, realizado bajo la urgente demanda que recae sobre el Estado nacional para enfrentar la pandemia global en curso.
El presidente de la Agencia I+D+i, Fernando Peirano, dio la bienvenida a los participantes manifestando que “esta red no solo reúne instituciones con capacidades, trayectoria y reputación, sino que es una invitación a que otros centros del Estado se sumen, es una red abierta. Tiende un puente con la academia, con las universidades y con los investigadores.” Agregó que “es una red que se funda en principios y valores que compartimos con Marta Novik y Gabriel Baum del Consejo Asesor, que abarcan la incorporación de la perspectiva de género, los principios de la ciencia abierta y la mejora incremental del uso de la información pública, constituyendo reservorio, compilándola y poniéndola a disposición para nuevas investigaciones y análisis.”
Peirano subrayó que “el informe que estamos presentando constituye un primer resultado muy destacado por los aportes que logra, al enlazar lo contingente, lo que se hizo puntualmente frente a la pandemia, con la estrategia de transformación del país, con pensar la pospandemia.” Concluyó remarcando que “el desarrollo es transformación, es ampliar el margen de acción que tienen las sociedades para elegir su propio camino, es la construcción de un estado más competente, un estado más articulado y creo que hoy con la nueva Red ISPA estamos dando pasos en esa dirección.”
El presidente del CIECTI, Luis Alberto Quevedo hizo un breve repaso de los objetivos de la institución y de sus principales líneas de investigación y destacó que “el impulso hacia la ciencia que retornó en 2020 después de esta impasse de cuatro años, nos permite decir que hemos retomado esa senda por la cual la Universidad de Quilmes y FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales) crearon el CIECTI, marcadas por su preocupación por lo público y por la importancia que tienen las instituciones del Estado como protagonistas del desarrollo y como reguladoras para darle orientación a la ciencia, la tecnología y la innovación.”
Agregó que “participar en la Red ISPA nos da mucha esperanza porque constituye un marco de cooperación con ministerios que nos parecen fundamentales: el de Trabajo, el de Producción y el de Ciencia y Tecnología. Reencontramos así un escenario propicio para el propósito que está en el origen de nuestro Centro, que es sumarnos a una política que piense la ciencia y la tecnología con la vocación por la inclusión, por crear conocimiento socialmente aplicable y por articular lo público y lo privado ligados a un proyecto de país.”
Daniel Schteingart, Director del CEP XXI del Ministerio de Desarrollo Productivo, manifestó su satisfacción por trabajar coordinadamente con otras áreas del estado “con la idea de que se pueden elaborar buenas políticas de desarrollo productivo que contribuyan a que Argentina pueda ser un país más próspero, socialmente inclusivo, con menores desigualdades territoriales, sociales y de género.”
El Subsecretario de Planificación, Estudios y Estadísticas del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Diego Schleser, consideró que para enfrentar el escenario actual “es necesario buscar soluciones en el ámbito de la producción y en el ámbito de la ciencia y la tecnología. Por eso creo que la Red ISPA nos permite dar cuenta de los diferentes abordajes requeridos para resolver los problemas.” Destacó que “en los últimos cincuenta años el empleo formal y la participación de los trabajadores en el ingreso, creció de manera simultánea, siempre, cuando creció la productividad.” Remarcó que la productividad “no puede ser equivalente a la intensificación del trabajo, ni a la precarización, ni a la flexibilización. Tiene que ver con otros factores muy relevantes, como la innovación tecnológica, la incorporación de capital y la utilización de los saberes de los trabajadores. Para atender a todos estos factores es necesario un abordaje integral como el que propone la Red que estamos comenzando hoy.”
Presentación del primer informe de la Red ISPA
Mariela Molina (CEP XXI), Lucía Tumini (SsPEyE) y Fernando Porta (CIECTI) tuvieron a su cargo comentar el primer producto de la Red, el informe “La Argentina frente al COVID-19: desde las respuestas inmediatas hacia una estrategia de desarrollo de capacidades”. El informe consta de 177 páginas dividido en cinco capítulos más las conclusiones y anexos, de todo lo cual los expositores destacaron algunos aspectos relevantes.
Molina explicó que “para la sistematización de la información a nivel internacional y nacional, utilizamos el enfoque de las ‘4D’, propuesto por la Agencia I+D+i, una aproximación metodológica que sintetiza cuatro dimensiones : 1) distanciamiento y prevención, 2) diagnóstico y tratamiento, 3) dispositivos y 4) digitalización.” La investigadora detalló la tipificación empleada para evaluar las iniciativas y las capacidades del sistema científico-tecnológico de los diversos países y de la Argentina en particular, para enfrentar y gestionar la pandemia del COVID-19.
Tumini informó sobre la irrupción del teletrabajo como una de las respuestas globales a la emergencia planteada por la pandemia. Planteó que el estudio quiso “indagar sobre el potencial del teletrabajo en la Argentina. Utilizando información de la ocupación de los puestos de trabajo declarados, y siguiendo la metodología internacional de Del Río-Chanona et al., 2020, que desarrolló el Índice de Trabajo Remoto (ITR), se estimó que el 28,5% del empleo registrado del sector privado de la Argentina podría realizarse de manera remota.” Agregó que la distribución del teletrabajo es “muy diferente de acuerdo al nivel jerárquico y al nivel de calificación del trabajador. Las ocupaciones de mayor nivel de calificación, como los gerentes o directores de empresas, son las que presentan un mayor potencial de teletrabajo, seguido por los profesionales científicos e intelectuales y los técnicos y profesionales de nivel medio. En el otro extremo se ubican las ocupaciones sin cualificación que presentan un bajo potencial y son las que más han sufrido las consecuencias de la cuarentena.”
Porta se refirió a los marcos regulatorios “asociados al proceso de registro, control e innovación que son puestos en tensión por la emergencia de la pandemia. En el documento se analiza por un lado todo lo que tiene que ver con la regulación de los dispositivos médicos y por otro el tratamiento de los derechos de propiedad intelectual vinculados a las actividades innovativas.” Sobre la regulación de los dispositivos médicos, señaló que “por su idiosincrasia la regulación tiende a tener un carácter conservador que genera una tensión con el aspecto disruptivo de la innovación. En tanto los derechos de propiedad intelectual, en el mundo y en la Argentina, en el contexto del COVID, son interpelados desde la excepción por razones de interés público y en donde la garantía del derecho a la salud aparece por sobre los derechos de propiedad intelectual.”
Remarcó también que el documento postula que “las soluciones tecnológicas y las prestaciones sanitarias deben ser concebidas desde el inicio como la capacidad de brindar un acceso igualitario de la ciudadanía a todas las soluciones tecnológicas, condición que debe estar embebida en los proyectos de nuevos desarrollos que el estado financia.” Señaló que el informe propone “algunos ejes de intervención, como la utilización del poder de compra estatal para desarrollar las innovaciones. Se requerirán nuevas regulaciones sobre las modalidades de compra pública, con una normativa que permita acuerdos de carácter precomercial, estructurando un instrumento muy potente para el desarrollo de innovaciones. Del mismo modo pueden promoverse formas de venture capital, analizando experiencias locales y del exterior de fondeo público y de fondeo mixto.”
Concluida la exposición sobre el informe, el Subsecretario de Estudios y Prospectivas del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, Eduardo Mallo, consideró que “hay dos aspectos claves en este proceso de la pandemia: por un lado la importancia, el peso específico y la eficiencia que se logra cuando desde el sector público se trabaja desde la perspectiva del esquema problema-solución. Por otro lado aprendimos la necesidad imperiosa de generar amplios niveles de coordinación institucional.” En ese sentido agregó que “la iniciativa de crear esta Red es una contribución importante para poner el conocimiento como insumo clave para la acción y para la toma de decisiones de políticas públicas.” Remarcó finalmente que “este escenario nos plantea nuevos desafíos de articulación entre el mundo del conocimiento, el mundo académico y el mundo de la gestión y de la solución de los problemas.”
Victoria Castillo que coordina el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial de la SsPEyE, refirió los datos y estadísticas relevados sobre el empleo como efecto de la crisis del COVID y también sobre las actividades teletrabajables y el tipo de actividad y de movilidad de los trabajadores que inciden en la probabilidad de contraer el virus. Informó que “en los primeros dos meses, marzo y abril, se perdieron ciento cincuenta mil empleos registrados privados.” Destacó, no obstante, que “lo peor de la crisis en el empleo parece haber pasado ya que en mayo el relevamiento indica una estabilización y junio parece mostrar leves señales de recuperación”.
Como cierre del webinar el presidente de la Agencia I+D+i Fernando Peirano realizó un breve balance de lo actuado por la red, en el que destacó que “el informe demuestra la importancia del diálogo entre las dimensiones de la innovación y la regulación, un desafío aún pendiente para las políticas públicas.” Consideró que “la tecnología bien orientada , incorporada a un ritmo conveniente, lejos de ser una amenaza, crea oportunidades de empleo en un país de industrialización intermedia como el nuestro.” Estimó también que “es necesario repensar los paradigmas porque es muy difícil hacer prospectiva sin modificarlos, sin que acompañen los cambios que están ocurriendo.”
Finalmente instó a “construir legitimidad de las políticas públicas con buenas estadísticas, datos, análisis y evaluaciones En esto la contribución de este estudio es muy grande y estamos avanzando en un estado con mejores políticas y con una agenda clave para el desarrollo como es la articulación entre empleo, producción y conocimiento.”
En el canal de Youtube de la Agencia I D i se encuentra disponible el webinar completo (ingresar aquí).
*Se puede acceder y descargar el informe completo aquí.